Corría el año 1997 cuando esta mítica sala de cine de su ciudad cerraba sus puertas y dejaba en la memoria de miles de jerezanos y jerezanas historias de amor, de vaqueros, de ciencia ficción y de miles de horas de cine que ya forman parte de nuestra ciudad.
Tras más de 20 años de abandono hoy una gran lona con el mensaje “Solar en venta” abandera este pobre edificio que ha sido víctima de todo tipo de actos vandálicos y que se temía, como ya ocurriera con otras salas de Jerez, saliera ardiendo.
Llega la hora de replantearse el modelo de ciudad que queremos y llega la hora de que aquellos que en campaña electoral abanderaban la idea de convertir esta sala en un espacio multicultural salgan en defensa de un cine que, como su propio nombre indicaba, hacía las Delicias de Jerez.
Y es que a lo largo de estos años muchos han sido los rumores sobre el futuro del Delicias: desde un bazar hasta un bloque de ocho plantas o una iglesia. Termine como termine, el espectáculo debe continuar…