Tanto el gobierno central como las comunidades autónomas han optado por descartar el posible confinamiento domiciliario por ahora y se han dado un margen de entre dos y tres semanas para poder valorar la eficacia de las medidas restrictivas tomadas a finales de la pasada semana.
Según el ministro de sanidad, Salvador Illa, el confinamiento domiciliario no es aún inevitable porque, según indica, las comunidades autónomas tienen aún margen para intentar doblegar la curva ascendente que en estos momentos tiene el número de contagios por COVID-19. En palabras de Illa “hay que ser rigurosos y darnos el tiempo suficiente“.
El ejecutivo central ha defendido las medidas establecidas a finales de la pasada semana ante la petición del gobierno autonómico de Asturias y Ceuta y Melilla de poder decretar un confinamiento domiciliario. En palabras del ministro de sanidad tras la reunión mantenida con las comunidades autonómicas “hay una estrategia nacional, unos indicadores en base a ellos analizamos el riesgo epidemiológico, donde hay margen y hay que evaluar estas medidas y darse un tiempo de dos o tres semanas”
Por otro lado Illa ha destacado el incremento de la vacunación de la gripe durante este año respecto a la campaña del pasado 2019, un incremento que roza el 30 %. Illa ha agradecido a la ciudadanía la alta respuesta que está teniendo en esta nueva campaña de la vacunación de la gripe.