La alcaldesa, Mamen Sánchez, ha visitado los Museos de la Atalaya para comprobar el resultado de las obras de reparaciones y consolidación de edificaciones que se han ejecutado en este equipamiento, dentro de las actuaciones de reforma y modernización que el Gobierno Local tiene proyectadas para impulsar este espacio cultural y de gran atractivo turístico de la ciudad.
La intervención ha sido desarrollada por la empresa INUR por un importe de 275.000 euros, siendo una actuación cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020 (Feder) dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) “Jerez 2022”. Esta estrategia está coordinada desde el Departamento de Planes Especiales que coordina la teniente de alcaldesa de Economía y Hacienda, Laura Álvarez.
Como ha explicado la alcaldesa, estamos viendo el resultado de una primera fase de mejoras que hemos acometido en las naves Don Jorge y Don Federico, en el porche y en el patio existente entre ambas y el Museo de los Relojes, al objeto de poner en valor este conjunto museístico de primer orden que tenemos en la ciudad, y que precisaba de algunas reformas que vamos a continuar con una segunda fase centrada en los elementos audiovisuales del mismo”.
La alcaldesa ha agradecido a la Fundación Andrés de Ribera “su aportación a la promoción de Jerez como referente museístico y cultural con estas magníficas instalaciones en la que estamos haciendo una importante inversión a través de fondos Feder que consideramos muy necesaria para optimizar su uso y además contribuir a su mantenimiento”.
En este sentido, ha resaltado “la apuesta del Gobierno por el cuidado y conservación del patrimonio del centro histórico como parte de la estrategia de recuperación y revitalización de sus barrios”, siendo estos museos, “uno de los espacios culturales más visitados y valorados de la ciudad que tenemos que cuidar y promocionar”.
Intervención desarrollada
El proyecto ha consistido en la eliminación de elementos que estaban en mal estado del antiguo casco bodeguero y actual Salón de Celebraciones Don Jorge, para posteriormente llevar a cabo trabajos de consolidación y reparación de zonas puntuales, como han podido ser refuerzos puntuales de vigas de madera, aplicación de tratamientos especiales en varias vigas, o arreglos varios en zonas de cubiertas.
Respecto a la nave Don Federico, los trabajos han consistido en la adaptación de los espacios multiusos para ampliar aforo y albergar un mayor número de ocupantes; igualmente, se han colocado nuevas instalaciones de protección contra incendios y pantallas en la parte inferior de las pantallas audiovisuales existentes para una mayor protección, y se ha dado un repaso al estado de los revestimientos y de las instalaciones existentes.
Por su parte, en el Palacio del Tiempo se han llevado a cabo también reparaciones puntuales, entre ellas, la reforma completa de la montera para solucionar problemas de filtraciones de agua así como la reparación de una vasija ornamental existente sobre el pretil de la cubierta de la planta baja.
Segunda fase de modernización de equipos audiovisuales
Por otro lado, el Gobierno tiene previsto iniciar en breve la licitación del proyecto de modernización de las instalaciones audiovisuales de los Museos de La Atalaya “en una clara apuesta por la transformación digital de la administración pública”, que contempla un presupuesto de 370.000 euros. Esta actuación igualmente cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020 (Feder) dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) “Jerez 2022”.
Este proyecto completará las intervenciones que acaban de culminar y tiene como objeto el suministro e instalación de los equipos de control, imagen y sonido necesarios para volver a convertir estos espacios en instalaciones de vanguardia y eliminar infraestructuras obsoletas; en el caso de la sala Don Federico, para mejorar su uso como espacio celebración de congresos, convenciones y conferencias; y en el caso del Palacio del Tiempo, para la difusión de su colección de relojes históricos.