El pasado domingo, José Antonio Abellán, párroco de la Basílica de ‘La Purísima’ de Yecla, ha afirmado durante la misa, en referencia a la educación especial de la Ley Celaá, que dicha ley busca integrar a los niños con necesidades especiales en los colegios ordinarios para que «estorben» y «entonces digan: ¿veis? Estos niños es que ni siquiera tienen que existir: hay que matarlos».
Abellán dice que «ahora mismo, tristemente, aparece ese nuevo proyecto de ley que dice que hay que quitar los colegios de educación especial: ¿sabéis lo que significa? Que para quién hace esas leyes esas personas no valen nada».
Y explicó: «No es para que todos estén al mismo nivel; no pueden, más quisiéramos, pero no pueden. Hay que atenderlos de una manera especial. Vamos a sacarlos fuera para que incomoden».
«Cualquier criatura que venga con un defecto psíquico o físico hay que matarla porque estorba en la sociedad. Y nosotros los cristianos decimos no: cualquier persona en cualquier circunstancia tiene un alma y su alma es perfecta porque ha sido creada por Dios», añadió el cura.
Para José Antonio Abellán, esta situación recuerda a la guerra civil en España en los que «te podían pegar siete tiros por ser cristiano» y la represión que sufren los católicos en la actualidad en otros países.
Pero, en realidad, lo que dice el texto es que «el Gobierno, en colaboración con las Administraciones educativas, desarrollará un plan para que, en el plazo de diez años los centros ordinarios cuenten con los recursos necesarios para poder atender en las mejores condiciones al alumnado con discapacidad».
Y añade: «Las Administraciones educativas continuarán prestando el apoyo necesario a los centros de educación especial para que estos, además de escolarizar a los alumnos y alumnas que requieran una atención muy especializada, desempeñen la función de centros de referencia y apoyo para los centros ordinarios».
El cura de Yecla se suma a criticar con bulos la ley Celaá como el partido de ultraderecha Vox, que primero en su programa electoral eliminaron la educación especial y luego se erigen como sus salvadores y cuando los medios ponen en evidencia su cambio de discurso se retractan y dicen que ha sido un error tipográfico.
Pero esta no es la única polémica de José Antonio Abellán. En 2019 pidió durante la celebración de una misa que los católicos votasen al partido que vaya «a defender mejor los derechos de Dios».
«Los derechos de Dios son el respeto a la persona humana, defender la vida, defender el matrimonio, defender la familia, defender la procreación natural de los hijos, defender la atención al enfermo y al débil y moribundo. Nunca la muerte de nadie, siempre la vida», enumeraba el párroco.