Para llevarlo a cabo, Transición Ecológica prepara una metodología de cálculo de los cargos del sistema que se unirá a la metodología de peajes para poner en marcha un nuevo sistema tarifario.
La intención de esta reforma, según explica Cristina Duro, directora de Regulación y Estrategia de Negocio de Capital Energy, es «cumplir con la Directiva Europea del mercado interior de la electricidad e incrementar la transparencia del recibo eléctrico, al separar más claramente los costes de las redes y otros costes del sistema y de políticas energéticas de cada país». El gobierno se escuda en leyes en la U.E para ni cuestionarse la idea de nacionalizar la energía. La trampa está hecha, el capitalismo manda.
A partir de abril, dicen, un cliente con una tarifa de precio regulado PVPC se le aplicarán automáticamente los nuevos periodos de discriminación horaria -punta, llano o valle- sin necesidad de hacer nada, lo que supondrá que su factura variará en función del momento del día en el que realice su consumo. Si, por contra, está en el mercado libre, será la comercializadora la que tendrá que detallarle su oferta. Es el negocio.
Según ha previsto el Gobierno, las horas punta serán por la mañana entre 10.00 y las 14 horas y por la tarde/noche entre las 18.00 y las 22.00 horas. Las horas valle corresponderán al periodo entre las 8.00 y las 10.00 horas, por la tarde de 14 horas a 18.00 horas, y por la noche de 22.00 a 24.00 horas. Y el horario más barato (hora valle) estará entre las 0.00 horas y 8.00 horas. Los sábados, domingos y festivos serán considerados horas valle.
La nueva normativa supondrá también cambios a la hora de contratar la potencia. A partir de abril se podrán contratar potencias distintas para horas distintas de modo que se pueda ahorrar en los costes fijos.