El Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla ha iniciado una investigación sobre un supuesto fraude de compra masiva de votos por correo para las elecciones que se celebrarán el 28 de mayo en la ciudad autónoma de Melilla, según han confirmado fuentes judiciales a RTVE. El caso, que involucra alrededor de 10,000 votos por correo, está actualmente bajo secreto de sumario.
Según la Delegada del Gobierno en la ciudad, Sabrina Moh, estos votos podrían influir en la decisión de “un tercio de los representantes” de la Asamblea de Melilla. La policía judicial investiga una trama recurrente que se desarrolla en barrios desfavorecidos y que involucra redes de amigos y familiares. Hasta el momento, se han identificado entre 30 y 40 sospechosos.
Para combatir este supuesto fraude, la Junta Electoral Provincial ha decidido exigir la presentación del DNI o pasaporte para la entrega del voto por correo en las oficinas. Además, la autorización de la misma Junta Electoral será necesaria para delegar la entrega del voto a otra persona.
Anteriormente, el sistema permitía que una persona autorizada entregara el voto de otra en las oficinas de Correos. Esta práctica suscitaba sospechas de compra de votos cuando una persona entregaba grandes cantidades de votos, incluso en oficinas de otras ciudades. Por este motivo, se ha reforzado la seguridad tanto en la oficina de Correos como en el puerto y el aeropuerto de la ciudad.
Este año, los carteros que entregan el voto por correo en Melilla irán acompañados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, tras el asalto de varios carteros por individuos encapuchados que llegaron a robar un centenar de votos por correo.
Sabrina Moh confirmó en TVE la investigación policial en curso sobre el posible fraude electoral y solicitó cautela para permitir que la investigación se desarrolle hasta el final. Según ella, si se confirman las presuntas irregularidades, podrían rondar el “20%” de un censo total de casi 55.000 electores.
Este caso de posible fraude no es una novedad en Melilla, ya que las sospechas e investigaciones sobre fraude electoral han sido recurrentes en diferentes procesos electorales de la ciudad. Recordemos que en las elecciones generales de 2008, dos figuras políticas importantes fueron condenadas por comprar votos por correo a cambio de planes de empleo.
Los dos principales partidos políticos de la Asamblea, el PP y el CPM, se han acusado mutuamente de estar detrás de las presuntas irregularidades en el voto por correo y del robo de documentación electoral a trabajadores de Correos.