El mundo de la cultura y el arte denuncia públicamente y apoya al rapero Pablo Hásel por lo que es, a todas voces, un atentado contra la libertad de expresión.
Cabe recordar que el rapero ha sido condenado a 9 meses de prisión por un delito de injurias y calumnias a la monarquía a través de mensajes escritos en su cuenta de Twitter y a través de canciones colgadas en Youtube. Es considerado como uno de los primeros casos de condena por los llamados “delitos de opinión”.
A través de un manifiesto publicado y difundido por redes sociales, más de 200 personalidades del mundo del arte y la cultura muestran su apoyo a Hásel.
Desde Pedro Almodóvar a Javier Bardem pasando por Joan Manuel Serrat, Def con Dos, Paco León, Aitana Sánchez Gijón, Pedro Guerra o Carlos Azagra conforman una extensa lista de gente del mundo del cine, de la música o del arte que unen sus voces para defender y mostrar su apoyo al rapero.
Manifiesto publicado
SIN LIBERTAD DE EXPRESIÓN NO HAY DEMOCRACIA
La persecución a raperos, tuiteros, periodistas, así como otros representantes de la cultura y el arte, por intentar ejercer su derecho a la libertad de expresión se ha convertido en una constante. Así, el Estado español ha pasado a encabezar la lista de países que más artistas ha represaliado por el contenido de sus canciones. Ahora, con el encarcelamiento de Pablo Hasel, el Estado español se está equiparando a países como Turquía o Marruecos, que también cuentan con varios artistas encarcelados por denunciar los abusos que se cometen desde el Estado.
El encarcelamiento de Pablo Hasel hace que la espada de Damocles que cuelga sobre la cabeza de todos los personajes públicos que osemos criticar públicamente la actuación de alguna de las instituciones del Estado se haga aún más evidente.
Es necesario que se difunda esta situación a nivel internacional, para poner de relieve en qué situación nos encontramos. Somos conscientes de que, si dejamos que Pablo sea encarcelado, mañana pueden ir a por cualquiera de nosotros, así hasta conseguir acallar cualquier suspiro disidente.
Es por ello que los abajo firmantes, como representantes del mundo del arte y la cultura en el Estado español, nos hemos unido para mostrar nuestro apoyo a Pablo, exigir su libertad, así como que se expulsen del Código Penal este tipo de delitos que no hacen sino cercenar el derecho, no solo de libertad de expresión, sino de libertad ideológica y artística.